Mandame una carta.

Lobizón. No sos el único.
Quiero quererte sin miedo, sin guardarme nada, sabiendo que vos vas a interpretarme lo mejor posible todo lo que te dé.
Quiero quererte con ganas, esperando que vos hagas lo mismo y no juegues con mi confianza en nosotros.
Quiero quererte con todo el corazón, y así no volver a llorar lágrimas de sangre y gemir angustia.
Quiero dejar de tenerte miedo, de tenerle miedo a mi futuro.
Quiero poder entregarme sin trabas, quiero ofrecerte mi porvenir como un sacrificio y que eso te contente.
Te quiero.

No hay comentarios: